El informe FOESSA, presentado este jueves por Cáritas, ha destacado que el modelo de integración social de Canarias es de “escasez restrictiva” y que esto se debe a un sistema productivo menos desarrollado que se traduce en una menor calidad de vida para el conjunto de la población y también en un mayor nivel de exclusión social. Se trata de un modelo que comparte con Andalucía y Murcia.
En el otro lado de la balanza se encuentran modelos como el de Navarra o País Vasco que se caracterizan por la “prosperidad inclusiva” al estar entre las comunidades autónomas de mayor riqueza y con un nivel más alto de calidad de vida o el de “escasez inclusiva” de Cantabria o Castilla y León, con un nivel de riqueza producida moderadamente baja en términos comparativos que se traduce en una calidad de vida comparativamente alta y en niveles de exclusión social también muy por debajo de la media.
Por su parte, un último modelo es el de “la riqueza ineficaz”, que es el caso de Madrid, “posiblemente el que mejor ilustra cómo en ocasiones un nivel alto en producción de riqueza, el mayor del Estado, tiene dificultades para traducirse en mejora de la calidad de vida de la ciudadanía y alcanza niveles comparativamente altos de exclusión social para su nivel de renta”.
El informe FOESSA presentado por Cáritas señala que tras dos décadas de crisis encadenadas, no se ha cerrado la brecha y España cuenta con una de las tasas de desigualdad más altas de Europa. El estudio se ha realizado por un equipo de 140 investigadores procedentes de 51 universidades, centros de investigación, fundaciones y entidades del Tercer Sector.
El documento incide en que los principales motores de la exclusión social en España son la vivienda y el empleo. “La vivienda es hoy el factor que está activamente reconfigurando nuestra estructura social, expulsando a uno de cuatro hogares de una vida digna, y triturando el difícil equilibrio de las clases medias”, aseguró este jueves Raúl Flores, secretario técnico de la Fundación FOESSA y coordinador del informe, durante su presentación.
Qué dice el informe sobre Canarias
FOESSA señala que la dispar distribución regional de la renta tiene un claro impacto en los respectivos riesgos de pobreza de cada una de las comunidades autónomas. En 2007, las regiones del sur presentaban las tasas más elevadas, superiores en algunos casos en más de diez puntos a la media nacional. En la situación opuesta se encontraban Navarra y el País Vasco.
El documento destaca que desde entonces, contrastan los grandes descensos de algunas regiones, como Extremadura o Canarias, con los aumentos en Andalucía, Catalunya o la Comunidad Valenciana. “A pesar de las mejoras en algunas zonas, el sur de España y Canarias siguen destacando por la mayor incidencia de la pobreza”. Así, el riesgo de pobreza según este informe ha pasado del 30,1% en 2008 al 25,8% en 2023.
En cuanto a la incidencia de la exclusión social, se habla de que en exclusión severa se encuentra un 9,2% de la población; un 41,2% están en integración precaria; un 16,2% en exclusión moderada y 33,3% en integración plena.
A pesar de tener un PIB per cápita similar al de Galicia (una comunidad con menor PIB per cápita), Canarias presenta más del doble de exclusión social que esa comunidad del norte de España.
El informe habla de que en términos generales los índices de exclusión social han ido reduciéndose en estas décadas en Canarias, pero aún siguen siendo elevados.