La presencia constante de Rosa Dávila (CC), presidenta del Cabildo de Tenerife, y de su vicepresidente, Lope Afonso (PP), en los medios de comunicación, en formatos de todo tipo y, en muchas ocasiones, bajo el cauce de la publicidad o propaganda institucional, más allá de las ruedas de prensa semanales en las que parece casi que entran y salen de la mano literalmente (otra cosa es la relación real entre ellos en el día a día, por las fuentes consultadas), esa omnipresencia, que contrasta radicalmente con la renuencia del anterior presidente (Pedro Martín, PSOE) a “vender” gestión, se traduce en cifras, porcentajes y, por supuesto, dinero. Tanto, de hecho, que a cierre de 2024, la partida de Publicidad y Propaganda gastó más de lo que tenía presupuestado, hasta el 107%, y hasta el pasado 30 de junio, ese mismo departamento lleva consumido casi un 70% de su partida, situándose claramente a la cabeza de todas las consejerías y apartados de las cuentas insulares de este 2025.
Estos números, por supuesto, dejan claro algo que, prácticamente desde el principio, se evidenció con el cambio de gobierno del PSOE-Cs (con el apoyo externo de Sí Podemos Tenerife) a CC-PP tras mayo de 2023. Desde ese verano, se notó que nacionalistas y conservadores, aunque especialmente Rosa Dávila (la sensación es que está empequeñeciendo a un tímido Afonso), querían una presencia potente y diaria en los distintos medios (prensa, radio, TV, redes…). De hecho, su imagen, opiniones o argumentario han aparecido casi en cualquier asunto: desde cualquier emergencia a la crisis del Club Deportivo Tenerife, desde el último festival Cook Music en Santa Cruz (otro acontecimiento “festivo” arrebatado por la capital al Puerto de la Cruz, el de esa exitosa cantinela de “sólo fiestas” de Marco González) al caso Cerdán, la migración, el bochornoso estado del Auditorio o el puerto de Los Cristianos.
Resulta casi imposible no encontrar alguna reacción o imágenes de Dávila con infinidad de noticias o acontecimientos ocurridos en los dos últimos años en la Isla o a otras escalas, aparte de su presencia constante en los sitios. Tanta, que se ha extendido la idea de que su labor es viajar por la Isla, aparecer en los lugares, por remotos que sean, y lograr ser más conocida por la población en general (algo que también se le echó de menos al anterior gobierno), mientras la gestión real la lleva en la sombra José Miguel Ruano, uno de sus grandes aciertos al confeccionar la lista y una de las mentes más brillantes de CC desde hace mucho.
Un millón más de euros en 2024 frente al año electoral previo
Esa premisa, casi obsesiva, por la imagen y “venta” de gestión se traslada con claridad a los números. En contrate con lo gastado en 2023 en Publicidad y Propaganda, cuando el porcentaje final alcanzó el 81,9%, el año anterior esa proporción rompió el techo y alcanzó el 107%. En 2023, por supuesto, el gasto se compartió entre los dos partidos y lo habitual es que se gaste más por tratarse de un año electoral, pero se dejó sin emplear un 18,1% y, de los 1,828 millones con que se contaba en este ámbito, ambos gobiernos gastaron 1,496. Sin embargo, el desembolso en el ejercicio siguiente elevó esos casi 1,5 millones a 2,481, un millón de euros más que se notaron a diario en los medios de distinto tipo, frente a los 2,319 que incluía esta partida al aprobarse las cuentas insulares.
Esto ha hecho que el principal grupo de la posición, el PSOE, haya calificado hasta ahora al gobierno de CC y PP como el de “los anuncios y la propaganda, pero sin casi gestión y muy pocos resultados”. De hecho, la semana pasada criticó a Dávila y Afonso por haber ejecutado un 5% menos del presupuesto en este 2025, a 30 de junio, que en el primer semestre de 2024, con sólo un 35,5% (de un total presupuestario total de 1.313 millones), prácticamente la mitad porcentual de lo que sí se ha gastado en publicidad y autobombo. Ese 70% (en concreto, un 69,82%) supone un total de 990.485 euros ejecutados (705.882) o adjudicados, frente a los 1,418 millones presupuestados para este ejercicio. O se da un “relajo” en el ritmo de gasto en este segundo semestre o se superará claramente ese 107% de 2024.
Esto contrasta claramente con lo ejecutado hasta ahora en otras áreas. Donde menos se ha gastado en los primeros seis meses de 2025 es en los 37,6 millones de euros compartidos por diversos departamentos, de los que sólo se han ejecutado 1,9 (un 5,2%). Le sigue el 18,9 de Cooperación Municipal y Vivienda, el 26,2 de Presidencia y Patrimonio, el 27,8 de Medio Natural y Emergencias, el 28,1 de Acción Social o el 29,2 de Turismo y Acción Exterior.
Por encima del 30% se sitúa la consejería de Empleo y Juventud (36,1%); el Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IASS), con un 36,2%; el departamento de Investigación e Innovación (37,2); el de Industria, Comercio y Sector Primario (con ese mismo 37,2) y el área de la presidenta (39%), mientras que Cultura, Museos y Deportes alcanza el 42,5% (cerca de la media de gasto global a estas alturas en 2024) y la que más, Movilidad, con un 55,6%.