El consejo de gobierno del Cabildo de Tenerife ha aprobado este miércoles el informe que permitirá avanzar en la ocupación de los terrenos necesarios para habilitar un aparcamiento en Cruz de Hilda, en Masca. Se trata de un espacio de 3.000 metros cuadrados con el que se pretende resolver parte de los problemas de movilidad en la zona, según la Corporación. El caserío de Masca, pese a su reducido tamaño, es uno de los enclaves más visitados por los turistas en la isla, lo que ha generado molestias a los vecinos residentes y ha provocado que estos se quejen directamente al Cabildo, que por ahora no ha puesto ningún límite al número de visitantes que pueden acceder a esta población, más allá de regular el acceso al barranco del mismo nombre y cobrar por ello.
En rueda de prensa, la presidenta Rosa Dávila, ha especificado que uno de los problemas patentes en la zona es la imposibilidad de que las guaguas turísticas puedan girar con seguridad en el citado mirador. Por ello, ha dicho, se habilitará este aparcamiento siempre respetando la orografía del terreno y la protección del entorno. No ha mencionado ninguna medida para limitar el número de visitantes o posibles restricciones al número de vehículos que accedan al núcleo.
El Cabildo de Tenerife estima que con esta actuación se permita así garantizar el giro seguro de las guaguas, evitar situaciones de riesgo y reducir la presión sobre la carretera. En el espacio que se prevé ocupar, caben ocho guaguas turísticas y diez coches.
Indica la corporación insular que este aparcamiento está previsto en el propio Plan Rector del Parque Rural de Teno, que contempla también la dotación de servicios como puntos de información o pequeñas áreas de estacionamiento controlado, todo dirigido a mejorar la experiencia del turista.