Se ha puesto de moda la elaboración y publicación de listados de personas influyentes, no sabemos si por falta de nuevas detenciones en las tramas detectadas o si porque ya está patentado en algún país neutral el influyómetro, aparato que mide hasta dónde son capaces de llegar, por ejemplo, los canarios que trabajan y/o viven en Madrid. Hace unos días nos hacíamos eco del listado publicado por el diario ABC, que colocaba en esa nómina de canarios influyentes en Madrid a Miguel Ángel Ramírez, directivo de ING. El error del diario nos hizo caer a nosotros en el mismo, pero ya tenemos detectado a ese influyente canario, que no se apellida Ramírez, sino Marrero, y fue cocinero antes que fraile. Es decir, que ya se ganó en Canarias mucho prestigio antes de dar el salto a la capital del Reino.