Rorro muestra su arte “sin ismos” en la Sala O'Daly
Siempre sorprende. Es un artista iconoclasta, con una obra enigmática muy personal que no sigue tendencias. Rorro expone en la Sala O'Daly de Santa Cruz de La Palma un total de 22 piezas bajo un título en clave críptica: -D3Mil'. “Lo mío es un arte sin 'ismos', no estoy amarrado a nada, no copio de nadie, mis obras soy yo, mis vivencias, mis miedos”, dice. “La exposición parte de la idea de que en 1814 se descubrió la cámara oscura, sin la cual yo no hubiese podido hacer lo que hago”, explica. Y en el centro de la sala Rorro ha instalado precisamente una cámara oscura en la que el visitante puede introducir su cabeza y contemplar un simple huevo de gallina. “¿Qué fue primero, el huevo o la gallina? Esa es la gran pregunta que nos hacemos todos, la clave está ahí”, comenta en su habitual tono reflexivo.
La solidaridad no podía estar ausente de esta muestra, y por ello, en la cámara oscura que ocupa el centro de la sala, Rorro ha colgado un bolso para recoger fondos en beneficio de los servicios sociales del Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma. Tampoco podía faltar la presencia de Pili, su compañera, que aparece en uno de los cuadros. “Ella es el pilar en el que estoy soportado”, reconoce.
La exposición de Rorro fue inaugurada el pasado viernes en un concurrido acto en el que intervino la restauradora de arte Nieves Cabrera. “Acciones culturales como la que presenciamos hoy invitan a reflexionar sobre el momento presente y hacen que nuestras convenciones se tambaleen”, indicó. “En Rorro no podemos separar lo que hace, lo que siente y lo que dice, artista y hombre son lo mismo: un ser comprometido con lo nuestro y por los nuestros”, aseguró.
Los directores teatrales Pilar Rey y Antonio Abdo no pudieron asistir a la apertura de la muestra, pero dejaron un mensaje escrito que leyó el arquitecto Clemente Álvarez. : “Estás mostrando sin rubor alguno lo que han sido tus convivencias más íntimas en este último espacio de tiempo”, recogía la nota.
Rorro entiende que “la cultura es patrimonio del ser humano y nadie 'potere' (puede, del latín) expulsar, intruso o no, a quien quiera aprender de ella”. “Lo que pretendo con mi obra es divertir, sacarle una sonrisa a la gente”, afirma. El objetivo lo consigue siempre.
