“La sentencia por el asesinato de Laura es justa desde la óptica del Derecho”
Recuerda que la mañana del 10 de julio de 2015 estaba sentada en el bar Cuarto de Tula de la Avenida Marítima de Santa Cruz de La Palma, reponiendo fuerzas después de la mágica y agotadora noche de la Danza de Los Enanos. “Me encontraba allí tomando un café con mi secretaria y unas amigas cuando vimos pasar coches de la policía a mucha velocidad y nos preguntamos qué habría pasado, pero cuando cogí el coche para irme a mi casa a descansar me enteré en la radio que habían asesinado a Laura”. Milagros Fuentes, abogada y ex decana del Colegio de Abogados de Santa Cruz de La Palma, no olvida aquellos momentos. “Se mezcló el cansancio de la noche de Los Enanos con el impacto de la noticia, me parecía increíble; sentí mucho dolor, y mucho más cuando conocí a la madre de Laura, que trabajaba enfrente de mi despacho”, ha relatado en una entrevista con La Palma Ahora.
Los padres de Laura González, que fue quemada por su expareja cuando trabajaba en un establecimiento comercial de la Calle Real de Santa Cruz de La Palma, acudieron al Turno de Abogados de Oficio para solicitar asistencia letrada. La designación le tocó a Milagros Fuentes, una abogada que desde los inicios de su carrera profesional se ha puesto de parte de los más débiles, destacando por su inquebrantable compromiso social y su talla moral, a quien el Consejo General de la Abogacía Española (CGAE) le otorgó el pasado mes de junio la Gran Cruz al Mérito en el Servicio a la Abogacía. “Cuando conocí el asesinato de Laura sentí la necesidad de manifestarme, de mostrar mi repulsa hacia ese acto violento contra una mujer y como decana coloqué un crespón negro en el Colegio, que celebraba en esa jornada el Día de la Justicia Gratuita, y escribí un artículo en el que expresé lo que sentía dentro de mí”, rememora.
El caso del asesinato de Laura González es el primero de violencia de género con resultado de muerte que ha asumido Milagros Fuentes, una letrada comprometida con los derechos de las mujeres, especialmente con las víctimas de la violencia machista, y con fama de “implicarse al máximo” en los procesos judiciales. “La experiencia ha sido por una parte, positiva, porque intervino un tribunal de jurado, pero por otra, dolorosa, me he implicado mucho y eso te llega a afectar”, reconoce.
Milagros Fuentes considera que la pena de 37 años de prisión impuesta al asesino de Laura González es “justa desde la óptica del Derecho, pero entiendo que desde el punto de vista de los sentimientos de sus padres, no lo es”. “Estoy muy satisfecha con la sentencia, aunque mis representados, nunca lo estarán; es una realidad, una cosa es el Derecho y otra los sentimientos”, subraya. “Mi satisfacción se debe al amplio contenido que recoge la sentencia, con los agravantes en violencia de género, y a que ha habido un comportamiento de mucha sensibilidad en todo el proceso para ambas partes, ha sido un proceso muy justo para ambas partes”, resalta. “En violencia de género es fundamental que los profesionales de la abogacía que ejerzan la defensa y acusación particular tengan sensibilidad en todo”, remarca.
Admite que “los procesos nunca son fáciles, y este ha sido complicado y largo, aunque podía haberse acortado, pero tengo una satisfacción muy grande”.
Cuando se le pregunta a Milagros Fuentes si hubiese asumido la defensa del asesino de Laura González, responde: “Nunca hay que olvidar que todos los ciudadanos tienen derechos constitucionales, la tutela judicial es efectiva; si a mí se me hubiese encargado el caso particularmente, no lo hubiese asumido, tengo derecho de elección, aunque a una defensa penal, por designación de oficio, nunca puedes negarte; otra cosa es lo que yo piense personalmente”, aclara. “La tutela judicial efectiva es prioritaria en todo ser humano, el derecho de defensa le ampara y es garantía del Estado de Derecho”, recalca.
Fuentes comparte las afirmaciones que la presidenta del Consejo General de la Abogacía Española (CGAE) y amiga personal, Victoria Ortega, realizó en una entrevista con este digital: “En violencia de género estamos fracasando todos”. “Claro que estamos fracasando todos mientras no se avance en igualdad de género; la culpa la tenemos todos, hay que tener sensibilidad en el día a día, rechazar, no permitir determinadas actuaciones y comportamientos sociales, denunciar y hacer frente a la situación”, manifiesta con tono exaltado. “Somos culpables por callar, por ser pasivos, por no enfrentarnos a determinados contenidos; somos culpables si observamos una agresión en la calle y miramos para otro lado, si oímos gritos y no hacemos nada… Si no hacemos frente a estas situaciones, no avanzaremos”, afirma con convencimiento. “Y la parte menos favorecida es la del género”. “Esta lacra hay que erradicarla, porque los casos siguen y recientemente hemos tenido otro en la Isla”, concluye.
