''Ni nos drogamos ni nos tiramos, ni compramos árbitros, sólo jugamos''
Los jugadores del FC Barcelona, y todo el cuerpo técnico han celebrado el título europeo, conseguido el pasado sábado al ganar en la final de la Liga de Campeones al Manchester United en Wembley (3-1), en un Camp Nou lleno hasta la bandera, en una celebración que ha sido corta, pero intensa.
El festejo en el Camp Nou arrancó, mientras en las calles de la capital catalana la plantilla celebraba la tradicional rúa, con las actuaciones musicales de Cris Juanico, Banda del Yuyu, Minimal 21, La Gran Aventura, Mine, Amelie, Joan Masdéu, Jofre Bardagí, Miguel Abras, Gertrudis, Brams, Perros, DelaHoja y las cantantes Mone y Monica Green que versionaron en catalán la canción The Best de Tina Turner.
Minutos antes de la esperada llegada de la primera plantilla, se iniciaron una serie de salvas pirotécnicas acompañadas por una coreografía en el medio del campo, donde había instalada una tarima azul. Posteriormente a los fuegos artificiales, se reprodujeron por los altavoces las narraciones del partido ante los red devils de diferentes medios radiofónicos internacionales, así como se reprodujeron por el videomarcador imágenes de la final.
Poco después, uno a uno cada jugador que ha participado en esta edición de la Liga de Campeones saltaron al campo al ser anunciados por el speaker del Camp Nou, Manel Vic. Los últimos en entrar fueron los capitanes Xavi Hernández y Carles Puyol, con el título de Liga, y después el primer y segundo entrenador, Josep Guardiola y Tito Vilanova, transportando la Orejona.
El primero en hablar fue el capitán Carles Puyol, que recordó que en la celebración de la Liga, el pasado 13 de mayo, se emplazó a la afición a volver el día 29. “Disfrutadla, que cuesta mucho ganar. Ya os dijimos que volveríamos a estar aquí”, sentenció.
Seguidamente, tomó la palabra Pep Guardiola que agradeció el apoyo durante toda la temporada. “Gracias a todos, por hacernos sentir tan cerca de vosotros. Gracias por el apoyo durante todo este año. El próximo año repetiremos”, afirmó el técnico de Santpedor, que cedió el micrófono a Leo Messi.
“Disfrutemos mucho de este momento tan maravilloso”, pronunció el delantero argentino, autor del segundo gol en la final. Tras el goleador blaugrana, habló Xavi Hernández que mostró su “orgullo” de pertenecer a la entidad blaugrana. “Siempre me he sentido orgulloso de ser culé y catalán, ahora más que nunca”, aseguró.
Posteriormente, Eric Abidal se alzó con el micrófono entre un estallido de aplausos. El defensa blaugrana superó esta temporada una operación para extirparle un tumor en el hígado. “Sin vuestro apoyo no hubiéramos ganado estos títulos. Gracias al equipo y al capitán por el gesto de ayer. Levantar la Champions fue impresionante”, declaró el lateral francés que este sábado actuó como capitán en el momento de recoger el trofeo.
Por su parte, Andrés Iniesta también agradeció el apoyo de los seguidores. “Muchas gracias por todo lo que habéis aguantado. Mi corazón dice que lo más grande es ser culé y estoy muy orgulloso por ello”, apuntó.
Víctor Valdés, que ató la senyera al título liguero a la vez que proclamaba “para que se enteren”, recordó la promesa de su entrenado hace una temporada, acerca del trofeo continental. “Os debíamos una desde el año pasado, aquí la tenéis. Disfrutadla”, indicó.
El último en hablar fue Gerard Piqué que lanzó un mensaje contundente hacía todas las polémicas que han perseguido al equipo esta temporada. “Nosotros ni nos drogamos, ni nos tiramos, ni compramos a los árbitros. Nosotros sólo jugamos a fútbol”, exclamó el defensa catalán que luego citó a todo el mundo en el concierto de la cantante colombiana Shakira Estadi Olímpic, al que acudirá la plantilla.
Finalmente, realizaron la vuelta de honor con el mismo hilo musical que en la celebración liguera, es decir al ritmo de I will survive y I gotta a feeling entre otras. Seguidamente contemplaron un piromusical desde la tarima central, que quedó desmerecido dado que todavía no había caído la noche en la ciudad y cerraron la celebración bailando todos unidos con las dos copas en medio, mientras las gradas cantaban el himno del club. El último en salir del césped fue un Guardiola que marchó ovacionado por la afición.