Minuto de silencio por el padre de Castiñeiras en el entrenamiento del equipo
Los jugadores y técnicos del Tenerife guardaron este lunes sobre el césped del Mundialito un minuto de silencio en honor al padre de Manuel Castiñeiras, fallecido el pasado sábado mientras presenciaba el encuentro que los blanquiazules disputaron ante la Ponferradina.
Éste no fue el único hecho luctuoso en el seno del Tenerife el pasado fin de semana, ya que Cristo Marrero sufrió la pérdida de una de sus abuelas, dato que no comunicó a sus compañeros hasta después de que se celebrara el partido en el campo del Toralín.
Las malas noticias, unidas a la caída en la clasificación del equipo, propiciaron un ambiente serio en la sesión de trabajo, en la que los jugadores titulares el pasado sábado se ejercitaron a menor intensidad que los suplentes, entre los que no estuvo Héctor, con bronquitis.
Mientras, el centrocampista Ricardo León, quien causó baja ante la Ponferradina, hizo trabajo específico.
El sentir de la plantilla lo expresó el portero Bernardo Domínguez, quien destacó que el pasado fin de semana “no salió nada bien”, aunque abogó por “olvidarlo cuanto antes y centrarnos en lo que viene ahora”.
“El grupo no está muy bien”, reconoció Bernardo, quien confirmó que durante el partido contra la Ponferradina “no nos enteramos” de lo que estaba sucediendo en la grada y que fue ya dentro de vestuarios cuando conocieron la noticia de la muerte del padre de Manuel.
Sobre lo estrictamente deportivo, el portero blanquiazul sostuvo que “hay que cortar esta racha” y que “ojalá sea este domingo con una victoria” ante el Elche, rival directo por el objetivo de la permanencia.
Apeló a afrontar la situación “con calma y ánimo, ahora más que nunca”, y eludió el término de final para calificar el partido del domingo en el Heliodoro, no sin reconocer que “será importante porque nos ayudaría a cortar nuestra racha negativa y la positiva del Elche”.
Bernardo reconoció que la falta de pegada exhibida por el Tenerife “no se debe alargar mucho”, aunque recordó que “lo venimos trabajando siempre, con tiros a puerta y centros y remates. Ojalá que empiece a dar sus frutos y la racha de llevar pocos goles se corte ya”.
En cuanto a los tantos recibidos dijo no saber si se deben a lagunas de concentración, aunque admitió que “igual en los momentos clave, en los que parece que no pasará nada, recibimos un gol”.