Phil Jackson, el 'Maestro Zen'' más laureado, consigue su décimo anillo
El entrenador de Los Angeles Lakers, Phil Jackson, consiguió en la madrugada de este lunes su décimo título como entrenador de la NBA, un nuevo triunfo que convierte al técnico angelino en el más laureado de la historia, superando la mítica marca de nueve campeonatos que poseía Red Auerbach, logrados todos ellos con los Boston Celtics.
Philip Douglas Jackson (17 de septiembre de 1945, Deer Lodge, Montana, Estados Unidos) ya tiene un anillo para cada dedo de sus manos. El que le faltaba se ha hecho esperar casi siete años, pero finalmente lo ha conseguido de forma brillante en el quinto partido de la serie de la final ante los Magic de Orlando.
Así, el mito del conocido como el 'Señor de los anillos' de la NBA se ha agrandado aún más, y es que este prestigioso entrenador norteamericano solo ha estado en dos equipos en sus 18 años de trayectoria como técnico y puede presumir de haberlos metido siempre en 'play-off'. Los Chicago Bulls, entre 1989 y 1998, y sus actuales Lakers, desde 1999.
Con los primeros, y de la mano de Michael Jordan, Jackson consiguió seis títulos (1991, 1992, 1993, 1996, 1997 y 1998), mientras que con los Lakers, y bajo la batuta de Kobe Bryant, ha añadido otros cuatro más (2000, 2001, 2002 y 2009) a un inmaculado currículum al que hay que sumarle el aro de campeón como jugador reserva de los Nueva York Knicks, en 1973.
La fórmula del éxito en ambos conjuntos ha sido siempre la misma. Una o dos superestrellas en la cancha, acompañadas por buenos actores de reparto, un triángulo ofensivo que se ha vuelto parte de su leyenda, y una extraordinaria química entre él y sus jugadores.
Su figura siempre ha estado rodeada de un misticismo especial. Sus montajes de vídeo motivacionales, sus frases filosóficas, sus gestos medidos y focalizados hacia un objetivo o sus manías casi enfermizas han hecho que se le conozca como el 'Maestro Zen', genio de los juegos mentales.
Sin embargo, los años empiezan a pesarle factura. Sus problemas de espalda, los crónicos de cadera y su reciente fascitis plantar que le obligará a ser operado en semanas han limitado aún más su movilidad y ya se plantea su retirada cuando expire su actual contrato en el 2010. Cuando eso ocurra, su sustituto, con el que ya se comienza a especular en los medios californianos, sabrá que se enfrenta a la responsabilidad de cubrir el hueco de una auténtica leyenda en el mundo del baloncesto.
