784 horas con mi amante

Quedé con la novia y me encontré con una amante. Cada día una cita arriesgada, cada encuentro un misterio, cada minuto una pasión en directo. Diez meses dan para mucho. 224 viajes por el mar de la radio.784 horas de palabras y música. Más de mil entrevistas de los temas más variados. Invitados de Canarias, Argentina, Venezuela, Cuba, Colombia, Estados Unidos, Sáhara, Senegal, Marruecos, Mali, Conakry, Guinea Ecuatorial, Zaire, Francia, Gran Bretaña, Alemania, País Vasco, Navarra? Curas católicos, militantes de colectivos gays, creyentes musulmanes, empresarios de la construcción, ecologistas, sindicalistas, neoliberales, jueces, abogados, imputados, concejales, alcaldes, vecinos, alcohólicos anónimos, juerguistas reconocidos, místicos, frívolos, profesores, estudiantes, catedráticos y universitarios de la vida, consejeros del cabildo, consejeras del gobierno, presidente del gobierno, portavoz de la oposición, derrotados electorales, ganadores de la estrategia, actores, escritores, actrices, miembros y miembras, feministas coherentes, machistas por reconocer, inmigrantes clandestinos, racistas institucionales, periodistas y otras profesiones sin prestigio?Gente anónima y nombres propios: Pepe Alemán, Herminia Fajardo, Rafael G. Morera, Bernardo Sagastume, Federico Utrera, Lola Múñez,Domingo Monzón, Luci Rodríguez, Pedro Alemán, Manuela Fernández, Jorge Hernández, Juan LuisCalero,Alexis Ravelo, Antonio Márquez, Marino Alduán, Manolo Lobo, Nayra Moreno, Carmen Padilla, Alexis González, Carlos Sosa ¡Cuántos pasajeros caben en un barco!

Decía hace diez meses que quería salir de la hibernación, del frío de la monotonía, del periodismo congelado, de los sumarios amarillos, de las broncas mercenarias por las preguntas incómodas al poder. Quería salir al sol y cantar como la cigarra. Y creo que acerté en la decisión, me monté en un barco donde he podido entrevistar a pasajeros de todos los colores y hacer debates con todas las voces, no me he tenido que justificar por las preguntas incómodas. Horacio Verbizky escribió que “periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, lo demás es propaganda”. El periodista argentino no se refería a la boda de Belén Esteban o al hijo de la maravillosa republicana Telma Ortiz, sino a lo que el poder político y económico no quiere que se sepa. La cosa tiene sus riesgos y cada vez que hablas hay alguien grabando y archivando las palabras para usarlas en el momento oportuno, para cerrarte la puerta de una empresa o abrirte la puerta de la cárcel. Ganas tienen y mi jefe lo ha vivido.

Pero a pesar de todo seguimos navegando. Ladran y cabalgamos. He vuelto a amar a esta profesión. Volví a enamorarme de la radio y navegando en el Correíllo llegué a los cuarenta años. Dicen que en la crisis de los cuarenta a los hombres nos da por comprarnos una moto o echarnos una amante. Yo preferí este barco a la moto, y cumplí con lo de la amante, esta amante maravillosa que es la radio libre de consignas, la radio hecha con emociones, palabras, polémicas, contrastes, voces, canciones de amor y de protesta? Parece que fue ayer cuando dije que quería salir de la hibernación y han pasado ya casi 800 horas de travesía en directo, de mensajes sin filtros, de aciertos y errores, de preguntas y respuestas, de risas y tristezas?Cuántas emociones con el micrófono abierto? La primera canción que sonó fue “Mientras respiremos” de Loquillo: “Mientras respiremos/ habrá aire que mantener/ y posturas que defender/ una vida que poseer/ siempre que pensemos podremos hablar /la palabra es nuestra la calle es su hogar/ mientras respiremos?” Y aquí seguimos 326 días después de aquel primer programa defendiendo la misma letra y escuchando todas las músicas. Que sepa el señor juez que Carlos Sosa es el culpable de que un servidor pueda decir ahora con el micrófono abierto lo que antes comentaba cuando estaba cerrado y que pueda escribir cada día en este periódico, por eso le doy las gracias. Como el Parlamento Europeo no ha suprimido todavía el mes de vacaciones voy a aprovechar este agosto para hacerme el sueco y abandonar a mi amante y perderme con mi compañera y los chiquillos. Les espero en septiembre en esta esquinita del periódico y/o en “El Correíllo” de la radio. Sean felices? o inténtenlo.

Juan García Luján