Cuentan los testigos presenciales (y lo confirman los que se han enterado de oídas) que estuvo caldeadita la reunión de constitución de la gestora que se ha hecho cargo de los designios de Coalición Canaria en Las Palmas de Gran Canaria. Como ya saben, el que era su presidente, Adrián Mendoza, dimitió tras muchos amagos y después de comprobar que su partido no piensa contar con él para un puesto de cabecera (salir elegido es otra cosa) en las próximas elecciones autonómicas y locales de 2011. Pero lo que no sabían los que le aceptaron la dimisión es que ésta llevaba aparejada su petición de baja del partido, lo que les plantea la duda de qué hacer con quien aún sigue siendo director general de la Energía, puesto desde el que acaba incluso de adjudicar una encuesta por 58.200 euros de curso legal y procedencia pública. Desde la dirección del partido se le ha instado para que se aclare de una vez por todas para saber si disponen o no se su cargo (de su coche oficial, de su teléfono móvil y de sus asesores, con lo que eso se cotiza actualmente) o si se queda hasta el final junto a uno de sus ejecutores orgánicos, el consejero Jorge Rodríguez.