Ya podemos decirles el nombre de la bicha: Jaume Llauradó. Si llega a ganar la presidencia del Barça, jamás daría nombre a una calle en la isla de Gran Canaria, seguro. Era el candidato que tenía la intención de que la compañía Auna esponsorizara al FC Barcelona, lo que significaría que el CB Gran Canaria tendría alguna dificultad para renovar contrato con su principal patrocinador. Sin embargo, enterados de esas intenciones, los directivos y responsables políticos, como Román Rodríguez y José Manuel Soria, se pusieron manos a la obra para evitar un cataclismo en el baloncesto grancanario. Los resultados han sido positivos, y todo hace pensar que entre este jueves y el viernes se firme el contrato de esponsorización con las condiciones y el presupuesto que a todos han agradado. Nos alegramos también.