Les podemos avanzar algunos datos de este aspirante a incorporarse a la carrera judicial. Es funcionario canario, y como él mismo indica en su brillante escrito, lleva más de treinta años cobrando de la administración pública. El verbo no está traído por los pelos, sino que responde al abigarrado currículum profesional de nuestro personaje del día. Suponemos que hay funcionarios que le aventajan en absentismo laboral, pero de él sabemos que ha sido capaz de estar de baja médica entre octubre de 2003 y marzo de 2005. Esa misma situación se viene produciendo desde octubre de 2008, en que presentó una baja por enfermedad común de la que todavía no ha sido dado de alta. Los que le ven por la calle a menudo lo encuentran hecho un brazo de mar, sin que la administración laboral haya hecho el menor esfuerzo por comprobar la gravedad y justificación de sus dolencias. Ah, y le protege mucho Coalición Canaria, que le ha permitido algunos saltos mortales en sus destinos.