Por fin hemos recibido una llamada del portavoz del Gobierno, Martín Marrero, que muy gentilmente nos ha explicado lo ocurrido con la organización del acto institucional del Día de Canarias, presuntamente celebrado este domingo en el auditorio Alfredo Kraus, de Las Palmas de Gran Canaria. Marrero, viceconsejero de Comunicación, ha desmentido que se haya externalizado el protocolo del acto, como nos había indicado una fuente de su departamento. Lo que se externalizó fue, en versión del portavoz, el Gabinete de Prensa. También ha desmentido Martín Marrero que haya habido una avalancha de protestas por la ineficaz gestión de las invitaciones de las personas que habitualmente son invitadas a este acto. Esa avalancha la redujo a tres casos concretos de otros tantos directores de medios, dos de Gran Canaria y uno de Tenerife. ¿El motivo? Pues muy sencillo, que el departamento encargado de mandar las invitaciones fue Canarias, Cultura en Red, que decidió hacer el envío ¡por correo ordinario! De Canarias sí que es ese departamento, no parece haber duda; de Cultura es porque a la Consejería de Cultura pertenece. Pero en Red, lo que se dice en Red, no parece que esté, ignorando como ha ignorado ese eficiente, económico y casi infalible método del correo electrónico. Si no saben cómo es, que pregunten a los de Atlante.