Respondió de inmediato el concejal de Disciplina Urbanística San Bartolomé de Tirajana, David Delgado, a nuestros comentarios del otro día sobre la churrigueresca reconversión que está sufriendo la ciudad turística. Reconversión consistente en la ley de la selva, aquella según la cual el que llega primero ocupa aceras y espacios públicos y el que venga detrás, que se invente una transgresión nueva. Una policlínica de reciente apertura ha instalado su sala de espera en una acera, lo que desde luego contradice cualquier principio de legalidad y hasta las medidas más elementales de intimidad del paciente, pero allá cada cual. La clínica tiene licencia de apertura, pero no permiso para tomar la acera, lo que ha llevado a una petición formal del Ayuntamiento a que se dejen de boberías, mira a ver. Las demás clínicas sureñas, agobiadas por la crisis y preocupadas por si las miran a ellas, aplauden la medida con sordina.