Desconocemos los motivos por los que este jueves no se constituyó en los juzgados de Santa Cruz, con traje de domingo y cara de yo no fui, don José Rodríguez Ramírez, alma, corazón y vida del independentismo canario y propietario-editor-director del periódico El Día. A decir verdad lo desconocemos nosotros y lo desconoce la juez titular de Instrucción 1 de esa capital, que lo esperaba a la muy prudente hora de las diez de la mañana para tomarle declaración en calidad de imputado por la gruesa querella que le ha interpuesto el socialista Santiago Pérez. Porque a esa hora no había llegado comunicación alguna de que al imputado le hubiera surgido razón de peso suficiente como para no constituirse ante la autoridad judicial. Y razón de peso hubiera sido, por ejemplo, una repentina indisposición intestinal, en forma de incontenible diarrea, que le impidiera alejarse más allá de un radio de cinco metros de un excusado. Pero conociendo el alto valor que don Pepito da a los compromisos institucionales y la alta consideración que tiene de la Justicia española, es de prever que las razones hayan sido mucho menos vacuas. Es decir, mucho más sólidas.