Tiene Luis Soria en su hermano José Manuel, el de los seis escalones por encima de la realidad, a un enorme maestro. Les contamos la última, pero ya saben que hay más. La Ley de Directrices, o sea, la moratoria, que el 14 de abril cumple su primer año, exige un Plan Especial que programe y concrete el crecimiento de los próximos tres años. Ya lo tienen muy avanzado en Tenerife y en La Palma, mientras que Gran Canaria, donde reina ese gran gestor de la cosa pública que es Soria, va con retraso. Y el plazo es de seis meses. ¿Cómo piensa contratar esos trabajos, tan importantes en el futuro inmediato de la isla el Cabildo de Gran Canaria? Pues muy sencillo, haciendo ascos a la Ley, la que obliga a hacer un concurso. Les contamos.