El pero, don José, no es otro que la aplicación de la legalidad vigente, a la que todos toditos estamos sometidos. Si usted, por ejemplo, demanda por lo mercantil a Canarias7 porque usted y sus abogados creen que les dañó empresarialmente por unos comentarios y en el juicio no sólo sale trasquilado sino que hay incluso cachondeo, debe usted revisar sus planteamientos legales y buscar mejores letrados. Si usted demanda a una periodista de Las Palmas (de Gran Canaria, con perdón) por un artículo en el que se defiende de una ristra de insultos por usted proferidos, es natural que le archiven la querella y le condenen a las costas, porque lo siguiente sería que la periodista se querellara contra usted por lo mismo que usted pretendía afearle (y de eso se escapó). Si resulta, queridísimo don Pepito, que es usted y sólo usted el que anda todo el día insultando a los demás (Ani Oramas, Perestelo, Zapatero, Santiago Pérez, Carlos Sosa y hasta dos juezas) lo normal es que si le meten alguna querella o alguna demanda de protección al honor o violación de la intimidad las termine usted perdiendo. Y pagando hasta por las boberías que le escribe Ricardito Peytaví. Por cierto, ¿cuándo es el juicio por lo de Santiago Pérez? ¿Le piden prisión?