Paco Valido ha tenido que tomar una dura decisión, no hay duda. Su compañera del CCN y ahora de paracaidismo sobre el PP no sólo era eso, sino además, amiga. El esposo de Guadalupe López, por más señas, ha sido el sponsor de la carrera política de ambos. Hay quien dice que en la dura travesía por la nada que ambos vivieron en la política local, Salvador Santana tuvo que pagar hasta las facturas del móvil del hoy alcalde. De ahí quizá el desparpajo y la impunidad con que ambos actuaban hasta este sábado. Si se confirmara el ascenso de Marcelino Galindo al área de Festejos -para lo que tendría que abandonar su cargo de asesor de la Dirección General de la Vivienda, donde gana más- se daría la paradoja de que ocuparía el área que a finales de los ochenta ocupó Valido bajo la alcaldía del viejo comunista, que presidía la Corporación gracias a un pacto progresista de ICU con el PSOE.