Un usuario del aeropuerto de Gran Canaria ha descrito a la perfección lo que le ha pasado al necesitar unas pilas. Así que dejamos que sea él quien lo exponga: Lo de cliente cautivo en términos aeroportuarios no deja de ser una verdad como un templo, pero de los grandes. Mi caso fue que, como padezco de hipertensión, me veo en la obligación de llevar un aparato para medirla (la tensión) cuando me noto algo raro. Y estando en el aeropuerto de Gran Canaria listo para viajar, el chisme en cuestión, que no tiene chivato del consumo de la pila, se queda sin carga, por lo que me dirijo a uno de los bazares a comprar las pilas necesarias para volver a ponerlo en funcionamiento. Y mi gozo en un pozo: 1º) Las pilas de venden en paquetitos de cuatro unidades. Ni de dos, ni sueltas. 2º) Como no hay otro remedio, y de ahí lo de “cliente cautivo”, no puedes desplazarte fuera del recinto aeroportuario viéndote que tienes que comprar forzosamente allí. 3º) El paquete de pilas con cuatro unidades, marca Energizer , Tipo AAA ? L03 de 1,5 V, no recargables, me cuestan 7,40 euros, o sea 1.250 pesetas de las de antes. Todo un robo o por lo menos un abuso descomunal de por lo menos un 400% a como se venden en cualquier otro lugar“.