Salvo que Soria haya caído en desgracia en el entorno de Dolores de Cospedal a raíz de la trama eólica y por lo mal que ha quedado la dirección del PP isleño con la familia Briganty, el presidente del PP isleño podría tener en esta dirigente un importante apoyo, siempre que sean ciertas las elucrubraciones de Nacho Villa. Dolores de Cospedal estuvo presente en 2003 en aquella famosa reunión del hotel Miguel Ángel en la que José Manuel Soria y Larry Álvarez ofrecieron a Alfredo Briganty ser delegado del Gobierno en Canarias en sustitución de Antonio López. Luego estalló el escándalo eólico, Briganty fue detenido y el abogado se consideró abandonado y maltratado por el partido.