En medio de todo este berenjenal político y judicial en que anda metido el Partido Popular, siempre hay lugar para la anécdota con estrambote. Ya saben que la esposa de José Manuel Soria, Mari Carmen Benítez, es procuradora de los Tribunales; y saben también que el eslogan que tiene acuñado su despacho es el que ella misma pronuncia cuando su esposo le presenta a algún personaje de la vida política o empresarial: “Oye, ¿y por qué no llevo yo tus cosas?” Algo parecido debió decirle la señora Benítez al marqués de La Oliva, de modo que éste se vio cariñosamente obligado a contratarla para que le lleve sus complicados asuntos ante el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, y más concretamente ante la Sala de lo Civil y lo Penal.