No sabemos si procedente de la Escuela de Chicago, que en todas las facetas por la que es conocida esta ciudad norteamericana sigue el doctor Soria como vicepresidente económico o será el liberalismo de Hayek, pero lo cierto es que don Paulino tiene también su propia doctrina económica: “España tiene un ritmo diferente, nuestros problemas no son los mismos que los de Estados Unidos y hay que adoptar medidas específicas, aunque para que la situación de Canarias mejore tiene que cambiar primero la situación económica de España”. No sabemos si el “ritmo diferente” será la samba o la salsa carnavalera, pero en los tiempos de la moneda única, el Banco Central Europeo y la interrelación de los mercados, donde el Premio Nobel de Economía 2008, Paul Krugman, ha explicado de forma divulgativa esta conexión Asia-Europa-EE.UU en El retorno de la economía de la depresión y la crisis actual (Ed. Crítica, 2009), alucinaciones como la de Paulino Rivero tras pasar por el foro del The Wall Street Journal producen vergüenza ajena a los economistas.