La fusión entre British Airways e Iberia transcurre “como estaba planeada”
LONDRES, 30 (EUROPA PRESS)
La fusión entre British Airways (BA) e Iberia transcurre “como estaba planeada”, según ha asegurado el consejero delegado de la aerolínea británica, Willie Walsh, durante la presentación de los resultados trimestrales de BA ante los accionistas.
El directivo de la compañía destacó los avances que se han producido tanto en esta materia como en la consecución del visto bueno de las autoridades antimonopolio para el establecimiento de una alianza trasatlántica con American Airlines (AA).
A este respecto, Walsh señaló que los primeros vuelos en código compartido junto a AA podrían iniciarse la próxima temporada invernal, ya que posteriormente se “emplearán como base” para la coordinación de sus programaciones, prevista para verano de 2011.
Asimismo, la compañía adelantó su intención de ampliar su capacidad a partir de octubre mediante la recuperación de diversas rutas canceladas el año anterior, lo que “no exigirá incrementar el número de aviones”.
Esta decisión se aplicará tras el “fuerte repunte” del tráfico durante el mes de julio, que afecta tanto al segmento 'premium' como en la clase turista. Sin embargo, la mejora del ingreso medio por pasajero ('yield') “comienza a dar signos de ralentización”.
Walsh subrayó el impacto negativo que tuvieron en los resultados del segundo trimestre los efectos del “innecesario” cierre del espacio aéreo debido a la nube de ceniza volcánica, así como las huelgas convocadas por el sindicato de tripulantes de cabina (TCP) Unite.
“OPTIMISTA” EN EL CONFLICTO CON LOS TCP.
El responsable de BA se mostró “optimista” respecto a la reunión prevista con el sindicato la próxima semana, y recordó que la última propuesta que ofreció la compañía fue rechazada por un menor porcentaje de votos que en anteriores ocasiones.
Asimismo, incidió en que “cada vez menos TCP” han secundado las protestas, con un apoyo que “no rebasó los 5.000 tripulantes”, de una plantilla compuesta por cerca de 13.000.
“Muchos trabajadores deben de estar decepcionados con la labor de Unite”, añadió Walsh, quien negó que haber retirado las ayudas para vuelos a aquellos TCP que secundaron la huelga sea uno de los principales escollos en la negociación, como plantea el sindicato.