Un ''limbo jurídico'' por el exceso de burocracia
El exceso de burocracia es el principal obstáculo para el crecimiento del Puerto de la Luz y de Las Palmas. Así lo advierten los representantes de consignatarios y estibadores que participaron este viernes en una mesa redonda en CANARIAS AHORA RADIO con motivo de la emisión de un programa especial de El Correíllo desde la sede de la Federación de Empresarios Portuarios de Las Palmas.
Manuel Domínguez, presidente de la Asociación de Consignatarios y Estibadores de Buques de Las Palmas (Asocelpa), acahacó la “pérdida de ritmo de crecimiento” del Puerto de la Luz al papeleo. “Tanto entre la llegada y la descarga, como entre la descarga y la salida de pescado al mercado, pasa mucho tiempo, los mercados se desabastecen”, afirmó.
Situaciones como la acaecida hace apenas dos meses, cuando quedaron bloqueadas mil toneladas de pescado en el muelle, sitúa su origen, según Manuel León, representante de la consignataria Intercorp, en enero de 2010, cuando entra en vigor la ley básica europea de control de la pesca ilegal. “En ese momento, Canarias no pidió especificidades que hacen falta para el puerto de Las Palmas”, lamentó.
León tildó de ''débiles'' las denuncias presentadas por ONG en relación a supuestas actividades ilegales de barcos que faenan en determinados países. “Esas denuncias no cuajan, las ONG están poco definidas. Una vez nos denunciaron a nosotros y demostramos que ese barco jamás había pescado en ese país”, relata.
“Cuando se paraliza el pescado, entra en una especie de limbo jurídico. Se ha ido dilatando la importación del producto”, concluye el representante de Intercorp.
Manuel Domínguez, de Asocelpa, teme que el exceso de burocracia haga desaparecer una flota pesquera “que lleva tantos años en Las Palmas”, en relación a la coreana y china.
Por su parte, Francisco Naranjo, presidente de la sección de estibadores de Asocelpa, defendió que el de La Luz es un puerto “capacitado”, con más de un millón de metros cuadrados dedicados a terminales de contenedores. “Se ha diseñado el Puerto para crecer de la forma en la que estamos creciendo”, apunta Naranjo.
Sobre el papel desempeñado por los estibadores en el importante motor de la economía canaria, Naranjo esbozó las diferencias entre la figura que permanece en el imaginario de los años 80 y 90 y la actual. “No tienen nada que ver con los de ahora. Están más formados, defienden el trabajo colectivo y hay calma social”.
Navieras
Uwe Harms, de Pauker Marítima, y Carmen Moreno, de MSC, también participaron en la mesa redonda para aportar la visión de las navieras. Harms resaltó la situación geográfica de la capital grancanaria como clave, ya que “invita a empresas de todo el mundo a convertirla en nudo para hacer sus negocios”.
Pauker Marítima representa a una naviera alemana que presta el servicio de contenedores entre el Norte de Europa y Las Palmas de Gran Canaria. MSC, por su parte, representa a un armador suizo y se constituye en la segunda naviera a nivel internacional, según contó en El Correíllo Carmen Moreno.
Para Moreno, la crisis “se ha sufrido muchísimo” en el puerto de La Luz, pero no se ha traducido en la pérdida de puestos de trabajo gracias al “esfuerzo” de las empresas. “El incremento de actividad en el Puerto se debe, entre otras cosas, a los transbordos internacionales”, agregó.
Cruceros
Juan Carlos Núñez, de Bergé Marítima, lamentó que Las Palmas de Gran Canaria esté “perdiendo oportunidades” con los cruceristas que llegan. “Se encuentran con que la ciudad está cerrada. Sería importantísimo para el desarrollo de la ciudad que los comercios abran los domingos”, defendió.
Núñez cree que el incremento del gasto del crucerista se producirá con una mejora en la oferta. “Hay que darle mucha información al turista, dirigirlo, saber a dónde llevarlo, que vaya a zonas comerciales, a Triana, a León y Castillo, a Vegueta, a Las Canteras, al Puerto...”, propuso.
