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El vicepresidente del Cabildo de Gran Canaria hizo trampas en las primarias de Podemos que ganó por solo 14 votos

El vicepresidente tercero en el Cabildo de Gran Canaria, Juan Manuel Brito (ALEJANDRO RAMOS)

Alexis González

La ola de Podemos era tan irresistible que había que subirse a su cresta costara lo que costara. Hasta haciendo trampas: Juan Manuel Brito, vicepresidente segundo del Cabildo de Gran Canaria y líder del sector crítico de Podemos ahora en trance de expulsión, ganó por solo 14 votos las primarias de marzo de 2015 para encabezar la lista morada al gobierno de la isla, y sobre todo gracias a que su grupo de activistas enrolados en la ONG Acción En Red montó todo un pucherazo digital.

El golpe electoral consistió en crear masivamente perfiles falsos dados de alta en el registro de votantes de Podemos, y así desnivelar la balanza a favor de la lista de Contigo Podemos, que él mismo lideró. Colaboradores directos de Brito y él mismo, según ha podido constatar Canarias Ahora, ejecutaron el plan, en solo 48 horas de marzo y bajo la excusa de que “ellos [la lista competidora] están haciendo lo mismo”, con alrededor de un centenar de registros fraudulentos en el sistema de votación de la formación emergente.

El plan se diseñó desde la ONG Acción En Red en Canarias, de la que recientemente se ha desligado la federación estatal por “mala praxis” política de su líder canario, el propio Brito. Fueron al menos dos estrechos colaboradores de Brito quienes a lo largo de toda una jornada, el 28 de marzo de 2015, se dedicaron a adquirir tarjetas prepago de números de telefonía móvil en diversas tiendas y locutorios del barrio de Santa Catalina, en Las Palmas de Gran Canaria.

Las compras masivas se llevaron a cabo en pequeñas cantidades, de cinco en cinco en cada establecimiento, hasta sobrepasar el centenar. De este modo se burlaba la ley que impide adquirir grandes cantidades de tarjetas prepago en una sola tienda, según han explicado fuentes conocedoras del fraude electoral interno.

Todas esos números de telefonía móvil debían corresponder al titular de un correo electrónico, que a su vez debía estar provisto de un DNI. Así, al día siguiente, 29 de marzo, la segunda parte de la operación montada por el grupo de Brito consistió en activar correos electrónicos masivamente, tantos como tarjetas prepago compradas, y a aquellos se les asignó un número de DNI creado para la ocasión.

Canarias Ahora ha comprobado que una parte de esos correos electrónicos se abrió con una misma contraseña, y que además esos emails contaban con otro de seguridad, como es habitual en caso de olvido de la clave, pero también falso. A su vez, los DNI inventados para el registro se activaron en páginas de Internet, a las que se accede con facilidad en la red para falsificar datos que no necesiten de una fidedigna comprobación, ni estén conectados a organismos oficiales.

“Echando mierda sobre una organización que no se lo merece”

El ahora consejero del grupo de gobierno formado por Nueva Canarias, PSOE y el partido por el que se presentó Brito, Podemos, niega la mayor y denuncia que todo se debe a que se está montando una campaña contra su persona, pero desde la secretaría estatal de Organización de Podemos han confirmado a este periódico que en 2015 se anularon una serie de votos al detectarse irregularidades.

Este diario ha tenido acceso a una muestra de esos correos electrónicos falsos con los que se manipularon las primarias de 2015, y la propia organización estatal ha corroborado que los nombres de esos emails en poder de Canarias Ahora figuran en su base de datos, aunque sin conocerse el sentido del voto de sus supuestos titulares. Por tanto se utilizaron para las votaciones pero fueron anulados por sospechosos. Y quienes lo hicieron eran parte del núcleo duro de Acción En Red.

Brito lo niega con rotundidad y dice saber quién está detrás de todo. “No sé de qué estás hablando, no tengo ni idea. Me dices cosas que yo alucino”, respondió al ser cuestionado sobre el pucherazo el pasado jueves. El dirigente morado dijo que “hay una campaña montada, me parece increíble. Es todo falso, están echando mierda sobre algo que es falso y no sé quién es, bueno, sí sé quién está detrás”.

El vicepresidente segundo del Cabildo, al conocer más detalles del alcance de la información comprobada por este diario, no ocultaba su indignación, sin salir de la “campaña de descrédito” a la que dice estar sometido: “Están echando mierda sobre quienes no se lo merecen [en alusión a su grupo de Acción En Red y Sí Se Puede]. Alucino. Están dañando a una organización que no se lo merece. Alguien que dice que se ha montado una serie de cosas, ¿quién lo dice?”, preguntó.

“No tiene ninguna consistencia. No tengo ni idea de lo que me estás hablando. Es una información falsa”, concluyó al solicitarle explicaciones este periódico el mismo día que declinó hacer valoraciones sobre su expulsión de Podemos.

Las primarias de Podemos al Cabildo constituyeron una auténtica batalla entre los grupos organizados dentro del partido: Contigo Podemos, de Brito, procedente en su mayoría de las ONG, el activismo social y lo que en su día fue la izquierda maoísta evolucionada al nacionalismo entre los años 70 y 80 del pasado siglo; y Claro Que Podemos, que al Cabildo encabezó el exmilitante del PSOE Miguel Montero, con el aval de la secretaria autonómica, Meri Pita, más ligada a la izquierda tradicional del entorno del PCE y sus disidencias, a través de Canarias por La Izquierda.

Según han explicado a Canarias Ahora fuentes consultadas, el grupo de Brito, que se acercó a Podemos después del éxito del partido de Pablo Iglesias en la cita de las Europeas de mayo de 2014, decidió dar el golpe de mano y asaltar la Casa Palacio del Cabildo como fuera al ver cómo perdían en el otoño de 2014 las primarias para dirigir el Consejo Ciudadano Insular, frente al grupo oficialista Claro Que Podemos.

Las votaciones al Cabildo estuvieron congeladas 48 horas en Madrid al detectarse irregularidades y decidirlo así la Comisión de Garantías Democráticas. Finalmente, el vencedor por solo 14 votos de diferencia fue Juanma Brito, nombrado aspirante a la presidencia de la corporación insular, frente a Montero, que fue tercero.

En la lista de Podemos al Cabildo la número dos fue la también activista histórica de Acción En Red y su precedente Canarias Alternativa, hoy consejera de Igualdad, María Nebot, a pesar de que obtuvo la sexta posición en las primarias por detrás de la activista del colectivo LGTB Gamá Silvia Jaén. Esta renunció a la candidatura, al igual que el quinto elegido, Miguel Ángel Rodríguez, para que la actual consejera de Igualdad subiera en la plancha electoral definitiva.

En total votaron 3.498 simpatizantes de la formación y se emitieron 801 votos en blanco, el 22,9%. Brito obtuvo 1.325 votos, el 49,13%, mientras 1.311 inscritos se decantaron por la candidatura oficialista de Claro que Podemos. Sebastián López e Iván Artiles, que también aspiraban al puesto como independientes, tuvieron un apoyo testimonial de 32 y 29 votos, respectivamente.

De escándalo en escándalo

Desde que accediera al grupo de gobierno del Cabildo de Gran Canaria, Brito se ha enfrentado a la dirección regional de su partido, provocando un escándalo público de nepotismo con su intención de nombrar directora general de Igualdad a Noemí Parra, su pareja, experta en la materia [tuvo que intervenir el presidente y valedor de Brito, Antonio Morales (NC), para frenarlo], hasta la constitución final de otro partido dentro de Podemos, Sí Se Puede, en el que han desembarcado la mayoría de activistas y simpatizantes de su grupo y por el que acaba de ser expulsado.

La polémica en su actividad institucional también le ha marcado en estos meses por el considerable incremento de las subvenciones que desde el Cabildo se han concedido a la ONG de la que fue referente en los últimos lustros, Acción En Red, así como las críticas que desde su propio partido se han vertido por el oscurantismo en las contrataciones de los departamentos de la administración insular bajo su control, en especial Participación Ciudadana e Igualdad, en manos de su compañera María Nebot.

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