La declaración de Haidar, aplazada por Bárcenas
La elevada sobrecarga de trabajo a que se enfrenta en estos días al juez Pablo Ruz por el Caso Bárcenas está obligándole a realizar horas extras y a alterar otros procesos judiciales en curso aplazando diligencias o declaraciones.
Fue lo que, por poner un ejemplo, le ocurrió el pasado lunes a la activista saharaui Aminatu Haidar, que tenía previsto declarar ese día ante Ruz en el marco de las diligencias abiertas por su predecesor, Baltasar Garzón, por delitos de genocidio y torturas en el Sáhara Occidental entre 1976 y 1987 y que fue iniciado tras admitirse una querella contra trece altos cargos marroquíes por la desaparición de cientos de saharauis.
Si bien es posible que Haidar vuelva a ser llamada para declarar dentro de dos ó tres semanas, la activista, que había viajado a Madrid en días anteriores, tuvo que volverse a El Aaiun el domingo tras conocer el aplazamiento, tras haber sostenido algún breve encuentro con miembros de las asociaciones de solidaridad con el Sáhara Occidental presentes en España.
Aunque la instrucción de este caso quedó paralizada tras una comisión rogatoria de Garzón a Marruecos antes de ser apartado de la carrera judicial, el juez Ruz volvió a reactivar recientemente el caso.
La instrucción de Garzón había quedado paralizada tras una comisión rogatoria cursada a Marruecos en la que pedía que notificara la querella a los implicados, preguntaba si los hechos habían sido investigados en Marruecos y solicitaba datos sobre la identidad de las víctimas y el lugar de inhumación.
“No nos han querido decir exactamente el motivo del aplazamiento, sólo que está relacionado con el Caso Barcenas”, ha dicho a Canariasahora el presidente de la Coordinadora Estatal de asociaciones solidarias con el Sáhara (CEAS), “parece que tanto él como el fiscal tienen mucho trabajo con los escándalos de corrupción y eso ha creado problemas de agenda”.
Hoy mismo se supo que el juez Ruz, tras recibir estos días el informe de una comisión rogatoria suiza, encontró una nueva cuenta en este país del extesorero del PP en el banco Lombard Odier de Ginebra.
Esta cuenta le habría permitido a Bárcenas transferir fondos que le permitieron acogerse a la amnistía fiscal y regularizar un total de 10,9 millones de euros.