El personal de Tenerife II alza la voz contra el hacinamiento de la cárcel
Los trabajadores de la prisión Tenerife II se concentraron este martes a las puertas de la instalación penitenciaria para denunciar las concisiones de hacinamiento, ya que hay 1.540 internos en una cárcel diseñada para 700. El personal del centro demanda más personal y la aceleración de la construcción de nuevos centros en las islas.
La concentración fue secundada por unos 140 funcionarios, según explicó el representante del sindicato CSI-CSIF Bernardo Fernández, quien calificó a Tenerife II como un “almacén” dado que el número de internos duplica el previsto para el centro, y aseguró que el personal está “desbordado”.
Consideró como “penosas” las condiciones laborales de los trabajadores de la prisión, cuyo número total es de 379, pero son algo más de 170, distribuidos en 8 turnos, los funcionarios que tienen contacto directo con los internos. En un módulo con 200 reclusos hay dos funcionarios por turno, informó Fernández.
El hacinamiento provoca tensión en los presos que dirigen su malestar a los funcionarios -a algunos les han llegado a agredir-, recalcó Fernández, quien culpabilizó a la Administración central de la situación actual.
Sin querer cuestionar los datos de criminalidad que maneja el Gobierno central, Fernández aseguró que cada vez hay más ingresos en prisión, y alertó de que se incumple la ley Orgánica General Penitenciaria al mezclar a presos preventivos -pendientes de ser juzgados- con internos que han sido ya declarados culpables, así como reincidentes con primarios. El representante de CSI-CSIF explicó que en Tenerife II hay ya 541 preventivos, y señaló que muchos son sometidos a extorsión o robos por el resto de internos.
El hacinamiento en la prisión, la falta de personal y la necesidad de nuevos centros penitenciaros son demandas conocidas y compartidas por las autoridades competentes, dijo Fernández, quien no obstante criticó el hecho de que no haya reacción por parte de los poderes públicos, a la vez que exigió soluciones.
“Estamos hartos de protestas puntuales. Estamos dispuestos a pasar a acciones más contundentes”, destacó el representante sindical, si bien no concretó las nuevas medidas, “más contundentes”, a la espera de que se reúnan todos los sindicatos para determinar las mismas.
Recordó que los funcionarios llevan más de 15 años esperando por la construcción de un centro penitenciario en Las Palmas de Gran Canaria y abogó por que las autoridades se planteen si es necesario un centro en Tenerife.
