Segura está ''satisfecho dentro de lo que cabe'' por el rescate de 48 personas
El delegado del Gobierno en Canarias, José Segura, dijo este jueves que, dentro de lo que cabe, está “muy satisfecho y emocionado” porque la profesionalidad de los funcionarios de Salvamento Marítimo ha salvado la vida de 48 personas que cayeron al mar cuando el cayuco en el que navegaban volcó a unas 90 millas de Tenerife.
José Segura declaró a los medios de comunicación que si bien se han salvado 48 vidas en condiciones “muy adversas” hay en torno al centenar a las que se busca, y añadió que hay ilusión por rescatar con vida a algunos de los inmigrantes que de momento se dan por desaparecidos.
Relató que el cayuco en el que viajaban estas personas fue avistado hacia las 20.00 horas de este miércoles desde un avión del Servicio Aéreo de Rescate, desde el cual se alertó que la embarcación albergaba un número elevado ocupantes y estaba en medio de la mar con olas de hasta cinco metros de altura, a unas 90 millas al sur de Tenerife.
José Segura indicó que el viento era muy racheado y había riesgo “muy importante” de hundimiento, por lo que se activaron todos los medios disponibles, y hacia el lugar se dirigieron helicópteros, aviones y remolcadores.
El primer remolcador de Salvamento Marítimo que llegó a la zona fue el Luz de Mar, que se colocó en posición para dar cobijo y protección al cayuco, ya que los funcionarios percibieron que las personas que ocupaban la barcaza estaban en situación de “auténtica desesperación y alto grado de nerviosismo”.
El delegado del Gobierno señaló que a los inmigrantes se les indicó que se quedaran sentados, pero “no fue posible y, por desgracia, cuando iba a comenzar el trasvase uno a uno, en dificultades notables, hubo una ola muy fuerte que cogió al cayuco de costado cuando un número elevado de personas se había levantado”.
Todos los ocupantes del cayuco cayeron al mar y desde las embarcaciones de Salvamento Marítimo se lanzaron aros y todo tipo de elementos de rescate, así como personal, resaltó José Segura.
Mensaje de ayuda
Ante la gravedad de la situación la Dirección General de Marina Mercante lanzó un mensaje de ayuda a los navegantes de la zona, al que respondieron siete buques mercantes y un portaaviones francés con helicópteros, que buscan al medio centenar de desaparecidos.
José Segura aseguró que ha sido una jornada “tristísima”, que le ha impactado porque se trata de unos jóvenes que a bordo de un cayuco y tras pagar la cuota correspondiente a un capo mafioso salieron a buscar otros horizontes para desarrollarse y mantener a su familia.
Además, prosiguió el delegado del Gobierno en Canarias, se trata de personas que no saben navegar y lo hacen en embarcaciones que no reúnen condiciones, por lo que insistió en que se trata de uno de los acontecimientos “más desgarradores” de cuantos ha vivido este año.
En cuanto a las 48 personas rescatadas, 36 de ellas están en la embarcación de Salvamento Marítimo Luz de Mar y doce en el Conde de Gondomar, que llegarán al puerto tinerfeño de Los Cristianos a última hora de la tarde.
Estas 48 personas están en buen estado una vez que han recibido atenciones médicas, añadió el delegado del Gobierno en Canarias.
José Segura reconoció que los cayucos con inmigrantes salen cada vez desde más al sur del continente africano para evitar el dispositivo de vigilancia Frontex, lo que hace que corran más riesgo de extraviarse en el mar y perder la vida.
El Gobierno estatal mantiene ''todos los medios''
Por su parte, la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, aseguró este jueves que el Gobierno mantiene “todos los medios” para intentar rescatar al máximo número de inmigrantes posible pero “lamentablemente las temperaturas del mar y las condiciones climatológicas son duras y eso resta expectativas”.
En una rueda de prensa, Rumí mostró su consternación por el naufragio de un cayuco con cien inmigrantes a bordo al sur de Tenerife. Según Rumí, el sistema de salvamento sigue en marcha porque el Gobierno mantiene “todas las expectativas y todos los medios” para intentar rescatar “al máximo número” de inmigrantes posible.
Rumí responsabilizó de la tragedia a las mafias que trafican con seres humanos y contra las cuales el Gobierno “combate diariamente” con medidas de control de las fronteras y a través de acuerdos de cooperación con los países de origen de la inmigración clandestina. De hecho, toda esta política integral de inmigración, subrayó Rumí, ha hecho que, en el primer semestre del año, la llegada de cayucos se haya reducido el 56% en comparación con el mismo periodo de 2006.
La reducción de la llegada de cayucos, insistió, muestra que el Gobierno ha hecho un “trabajo contundente” contra las mafias.
