Los servicios de extinción enfrían la zona quemada
Los servicios de extinción continúan enfriando la zona quemada de Los Caideros, en los altos del municipio grancanario de Gáldar, para evitar que las llamas se reaviven. Los bomberos no pueden bajar la guardia porque todavía quedan puntos calientes que deben refrescar para que el fuego no vuelva a brotar.
El incendió arrasó 50 hectáreas de monte bajo y pastizal. Aunque el viento, las altas temperaturas y los bajos ratios de humedad dificultaron las tareas de extinción, los dispositivos de Medio Ambiente y del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria lograron controlarlo sobre las 17:45 horas del jueves. Asimismo, las llamas provocaron que algunas familias tuvieran que ser evacuadas aunque al final de la tarde pudieron regresar a sus viviendas situadas en el barranco de Chirino.