Vinculan el incremento de diabéticos con el auge del turismo
El nefrólogo Benito Maceira ha liderado un estudio en el que se responsabiliza al turismo del alto índice de diabéticos que hay en Canarias. Así, se plantea que es el cambio de vida del lo rural a lo urbano fomentado por el auge del turismo en los últimos años lo que ha provocado el aumento espectacular en la tasa de diabéticos.
En ese estudio se asegura que las causas de que en Canarias se triplique la media de diabéticos de toda España residen, no tanto es cuestiones genéticas, “sino en que se ha cambiado de una manera muy brusca el modo de vida”, planteaba Maceira. Eso se cumplimenta con la idea de que “se ha abandonado el campo”.
Además, el facultativo criticaba que instrumentos como el Régimen Especial de Abastecimiento “no subvenciona la importación de alimentos sanos, sino de azúcar y productos grasos”.
En la presentación de su estudio, que tuvo lugar en la sede del Colegio Oficial de Médicos de Santa Cruz de Tenerife, este nefrólogo cambió la definición de que “canario es una persona que tiene un familiar en Venezuela y otro diabético”, por “canario es una persona que tiene un familiar en Venezuela y otro con una diabetes complicada”.
En esa línea, incidió que “el 61% de los casos de diabetes no se diagnostica en ningún chequeo, sino tras alguna complicación”. Esto significa que “hay miles de canarios que son diabéticos y están entre 15 y 20 años sin tratamiento”. Éstos acudirían al médico “cuando sólo es posible apuntalar”.
Complicaciones
Benito Maceira se atrevió a aclarar que “en Canarias no hay más diabéticos, hay más complicaciones de la diabetes”. El dato más preocupante que el nefrólogo saca de su estudio es que “la mortalidad causada por la diabetes en las Islas es 2,5 veces más alta que la media nacional”.
Este dato empeora si se lo compara con comunidades autónomas aisladas, como Madrid, “donde es 4 veces más alta”. En este punto justifica que Canarias tenga el mismo número de diabéticos que el resto de las comunidades. “Ya han muerto y los muertos no se cuentan”, explica Maceira.
Además, el de la alta mortalidad de diabéticos es un dato que, para él, “justifica que haya más diabéticos jóvenes que viejos, es que no llegan”. El número de diabéticos va aumentando en el resto de comunidades autónomas, mientras que en Canarias disminuye.
La solución para estas cuestiones reside en la prevención, planteaba el doctor. En esa línea, invitó a las autoridades “y a los padres a que incidan en la educación alimentaria”. Además, explicó que “el Servicio Canario de Salud debe intentar diagnosticar más casos mediante chequeos, no esperar hasta que sea muy tarde”.