El Cabildo de Gran Canaria intenta salvar el contrato alemán de Newrest
José Miguel Bravo de Laguna, presidente del Cabildo de Gran Canaria, ha decidido mediar en el conflicto que mantiene en vilo a la empresa de catering Newrest, situada en Telde, tras conocer que podría perder el contrato con dos de sus clientes más importantes: las aerolíneas alemanas TUIfly y Condor.
De esta forma, el jefe del gobierno insular enviará un comunicado institucional a las empresas TUI (en el caso de TUIfly) y Thomas Cook (Condor). Además, desde la Consejería de Turismo del propio organismo, cuyo titular es Melchor Camón, se iniciará un proceso de negociación con ambas compañías.
La empresa de catering se encuentra situada en las inmediaciones del Aeropuerto de Gran Canaria, actualmente bajo el paraguas del Grupo Newrest, y lleva cumpliendo su función desde su fundación en 1962. Aunque ha pasado por varias manos, el edificio y el personal siempre se han mantenido.
Ahora, después de más de medio siglo trabajando, las aerolíneas alemanas han decidido a la misma vez, rescindir el contrato que venían manteniendo en Gran Canaria, Tenerife, La Palma, Lanzarote y Fuerteventura para suministrar comida durante el vuelo, a partir del próximo 1 de mayo.
La razón, según los comunicados enviados desde Alemania, responde a un cambio de concepto que no contempla ofrecer catering a todos los pasajeros, realizando una única contratación en el lugar de origen para viajes de ida y vuelta, con empresas de aquel país. Desde las líneas aéreas atribuyen la medida a los turoperadores TUI y Thomas Cook, propietarias de las mismas.
Ana Salvador, gerente de Newrest, admite que “el mercado alemán es sumamente importante” y sostiene que “nos hace bastante daño, obligándonos a hacer una reestructuración, que es lo que no queremos”. En cifras, podría afectar a 460 empleos directos e indirectos.
En la filial canaria, tratan de agotar todas las opciones de que disponen para salvar los puestos de trabajo y, además de mantener reuniones con Bravo de Laguna, también lo han hecho con Juan José Gil (alcalde de Ingenio) y María del Carmen Castellano (alcaldesa de Telde).
El proceso está en su primera fase y dentro de una semana deberían conocer la respuesta definitiva de las compañías germanas. Los afectados han planteado hacer una contraoferta para salvar el negocio, aunque no creen que el problema radique en el precio, ya que, según afirma Ana Salvador, “nos cuesta mucho creer que producir las comidas en Alemania sea más barato que aquí, por la mano de obra y los costes”.
Por su parte, María del Carmen Castellano ha solicitado a las contratantes que den marcha atrás en su decisión. Tras reunirse con representantes del Grupo Newrest en las islas, ha calificado el conflicto de “importantísimo para nosotros, debemos velar y apostar por las empresas del municipio, y espero que estas compañías reconsideren su posición”, ha asegurado la alcaldesa.
La mayoría de trabajadores en Gran Canaria proviene de Vecindario (Santa Lucía de Tirajana), Ingenio y, sobre todo, de Telde, municipio más afectado donde reside el 40% de los empleados directos.