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CrossFit: Tú contra ti mismo

El deportista de Cross Fit Rich Froning, considerado como el hombre en "mejor condición física del mundo", al vencer cuatro veces consecutivas en los Cross Fit Games. Creative Commons.

Iván Alejandro Hernández

Las Palmas de Gran Canaria —

Con aproximadamente 20 años de vida la palabra CrossFit se ha expandido por todo el mundo a una velocidad vertiginosa.

Miles de personas practican un método de entrenamiento que ya ha pasado de ser una “moda” a un deporte con competiciones mundiales regladas, patrocinadores y deportistas de éxito que, además, mueve importantes cantidades de dinero.

Pero… ¿Qué es el CrossFit?

El CrossFit es un deporte que nació cuando el entrenador personal y ahora empresario, Greg Glassman, ideó un método de acondicionamiento físico mientras se dedicaba a preparar a cuerpos y fuerzas de seguridad desde los años 70 en California (Estados Unidos).

Mientras ponía en práctica los entrenamientos tradicionales, Glassman consideró que lo que se realizaba hasta ese momento era “ineficiente” porque no mejoraba “la condición física”.

Básicamente aglutinó movimientos existentes de la halterofilia o del deporte base (como correr o hacer flexiones) y le puso un nombre propio.

Tras ponerlo en práctica durante varios años con cuerpos de seguridad y al crecer la demanda de todo tipo de personas, en 1995 decidió abrir el primer gimnasio en Santa Cruz (California) adaptándolo al público no especializado.

En cinco años, su gimnasio pasó de 18 inscritos a 1.700. A día de hoy es una marca registrada localizada en Estados Unidos llamada CrossFit inc. que supera los 11.000 afiliados en países de todo el mundo y genera unos 4 mil millones de dólares anuales (como marca está valorada en torno a los 100 millones de dólares), según la revista Forbes.

Para ser “afiliado” y poder utilizar esta palabra en un gimnasio debe pagarse un canon de aproximadamente 3.000 dólares anuales.

Esto da derecho a utilizar todo el material que se produce desde la empresa en relación a este deporte (ejercicios, entrenamientos, videos en la web, campeonatos, etc.).

También existen espacios dedicados exclusivamente a la práctica de este deporte denominados “box”, generalmente naves industriales con todo el material necesario para practicar CrossFit y entrenadores especializados con título acreditado.

España, aunque tardíamente, ha experimentado un gran crecimiento en poco tiempo con más de 250 box en todo el territorio y Canarias no es una excepción.

En el Archipiélago existen 16 box oficiales: dos en Lanzarote, uno en Fuerteventura, cuatro en Gran Canaria y nueve en Tenerife, siendo la séptima comunidad autónoma en España con más locales.

Básicamente el Crossfit es un deporte que mezcla movimientos funcionales, como correr o saltar, llevados a alta intensidad con ejercicios de fuerza sacados de la halterofilia”, explica uno de los fundadores de CrossFit Sebadal, Rubén Castro, un Box localizado en Las Palmas de Gran Canaria, que cuenta aproximadamente con un año y medio de vida.

Es decir, que “la diferencia entre un entrenamiento funcional de toda la vida y el CrossFit es que en este último son series por tiempo, con muchas repeticiones y escaso hueco para el descanso”, recalca Ruyman Navarro, entrenador de Cross Fight en Jet Canarias. 

En este punto es preciso diferenciar entre CrossFit y otros nombres como Cross Fight que utilizan algunos gimnasios. 

Según Navarro, la diferencia radica en que “todos los que hagan ejercicios en un gimnasio bajo el término CrossFit deben pagar un canon a Glassman y los que no quieren o no pueden pagar a la franquicia, le ponen otro nombre”.

Existe cierta controversia en torno a esto, ya que según Castro “hay gimnasios que utilizan la palabra CrossFit y no son afiliados”.

Para Castro es algo que es clave, porque en los box que pagan el canon “el entrenamiento tiene una filosofía donde se machaca la técnica, en cómo hacer los ejercicios, algo que marca la diferencia”.

Un negocio

Y es que el CrossFit, además de un deporte, en muy poco tiempo se ha convertido en un negocio rentable gracias, entre otros muchos factores, a la marca Reebok, que ha tenido mucho que ver en su crecimiento.

La filial de Adidas supo ver el filón y en 2011 decidió ser patrocinador de los CrossFit Games, un evento mundial donde compiten los mejores deportistas de esta disciplina y cuyo premio pasó de los 400 dólares en 2007 a los dos millones en la actualidad.

Sin hacer un recorrido exhaustivo por la marca de calzado y prendas deportivas, es preciso recalcar que Reebok (con más de un siglo de vida) ha tenido una influencia muy importante en el CrossFit, y viceversa.

Durante sus mejores años, Reebok rivalizaba con Nike patrocinando a deportistas de élite y a grandes eventos, como la NBA o el fútbol.

Cuando Adidas compró Reebok en 2006 despersonalizó a la compañía que había adquirido por más de 3.000 millones de dólares para competir con Nike en el mercado estadounidense.

Tras varios cambios de imagen de marca, Reebok fue poco a poco cayendo en el olvido de los consumidores sin saber a qué tipo de público iba enfocada su marca.

Han sido los deportes de fitness los que ha “revivido” a Reebok, con el CrossFit a la cabeza y otros como el Spartan Race.

Tanto es así que en 2014 la marca cambió su imagen introduciendo el delta, un símbolo que usaba desde hacía varios años para identificar a la división de CrossFit, con el objeto de enfocarse exclusivamente a este tipo de deportes con el usuario como protagonista.

¿Por qué?

Entre otras causas porque básicamente el CrossFit cuenta cada día con más adeptos y si hay público, hay mercado.

Ruyman Navarro, quien lleva practicando este deporte durante cinco años explica que “el CrossFit tiene mucha publicidad, sobre todo a través de internet y redes sociales, pero realmente mucha gente no sabe qué es realmente”.

En su experiencia como entrenador nota cómo este deporte “no sé qué tiene que engancha. Veo gente que viene a probar la primera vez y lo pasan fatal, pero vuelven y vuelven. En una estadística aproximada, diría que ocho de cada diez personas que lo prueban, siguen viniendo”.

Para Rubén Castro son varios los factores que determinan que cada vez esta disciplina cuente con más practicantes.

En primer lugar este deporte aporta muy buena forma física y existe mucha variedad en los ejercicios. Segundo: cada uno puede ponerle la intensidad que quiera; y tercero, se crea una comunidad en cada entrenamiento donde entre todos compiten y cooperan en grupo”, concluye.

Sin embargo, existen voces contrarias a la práctica de este deporte argumentando que conlleva un alto riesgo de lesión.

Al ser un ejercicio de alta intensidad, llevados a cabo con rapidez y con movimientos que requieren de técnica, una ejecución sin conocer la práctica adecuada aumenta el índice de lesión, sobre todo en articulaciones.

Muchos fisioterapeutas dicen que es muy lesivo, pero realmente este deporte te refuerza los tendones, las articulaciones y la musculación. Es decir, como en cualquier otro deporte, si cada uno conoce sus límites y practica la técnica, no deberían producirse lesiones”, explica Navarro.

En Canarias

Por otro lado, en Canarias, además de los box nombrados anteriormente, se han llevado a cabo varios campeonatos.

Un ejemplo es el que se realizó en Las Palmas de Gran Canaria, el llamado “Canary Championship”, durante el pasado mes de septiembre.

Contó con aproximadamente “150 competidores de todas las islas y de países como Estados Unidos o Reino Unido y un público de alrededor de 600 personas” en los campos de fútbol de Las Arenas, según Máximo Torres, de Épic Events, una de las empresas organizadoras del campeonato.

Además, un canario, Bryan Hernández (colombiano nacionalizado en España, de Lanzarote), ha sido el primer español de la historia en competir en un CrossFit Games. Fue en la edición de este año celebrada en Los Ángeles, donde participó en la categoría de adolescentes ocupando el séptimo lugar del mundo.

En definitiva, son varios los factores que hace del CrossFit un deporte que más que una moda, parece que ha llegado para quedarse. 

Hay mucho dinero invertido, siguen creciendo las instalaciones en todo el mundo, se comparte a través de internet y puede practicarlo cualquier persona según lo que desee lograr (incluso se están añadiendo deportistas de élite para patrocinarlo). 

Según Ruyman Navarro, todo se puede resumir en una frase: “El CrossFit está teniendo tanto éxito porque, como dice una de sus máximas, es competir contra ti mismo”.

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