Se pondrá como se quiera poner; podrá ponerla a parir entre café con leche y café con leche, decir que es un gran error haberla fichado y que el acierto ha sido el del PSC metiendo a Arcadio. Pero lo cierto es que José Carlos Mauricio estuvo presumiendo, y mucho, de ser el ojeador que atrajo a Nardy Barrios a las filas del nacionalismo y olé. Inclusó participó, privado de sus huesos, en las reuniones celebradas en casa del presidente junto a Carmelo Ramírez y la interesada. Ahora no, ahora toca hacerse el loco, no vaya a ser que alguien desde el PP le dé las gracias por el fichaje, que trae a Pepa Luzardo de los nervios.