Vaya por delante que no tenemos nada contra Orlando Umpiérrez García, al que no tenemos el gusto de conocer salvo por la fotografía que aparece en la web del Gobierno de Canarias. Es el nuevo director general de Aguas, integrado en el organigrama de la Consejería de Infraestructuras, Transporte y Vivendas. Umpiérrez, que tiene cara de buena persona, ha llegado a donde ha llegado gracias a los milagros que se producen en la política canaria. Es miembro de la ejecutiva de CC de Lanzarote, o al menos lo era cuando José Carlos Mauricio y Paulino Rivero se fijaron en él para ganárselo y enfrentarlo a Juan Carlos Becerra. Es un militante disciplinado cuyo trabajo en campaña consistía en pedirle el coche a su señor padre e ir al aeropuerto a recoger a las personalidades del partido para llevarlas de mitin en mitin. Ahora es director general para que no olvide nunca, en las votaciones del partido, a quién tiene que apoyar. No sabemos si tendrá carrerón, pero ha empezado de este modo tan singular.