¿No querían caldo? Pues venga, más tazas. Las acercábamos ayer en esta misma sección una aproximación al dislate de derroche del Gobierno de Canarias en aplicaciones informáticas. Y les hablábamos del Sefcan, Atlante, Meta 4... Permítannos que hoy nos adentremos en las turbulentas aguas de la empresa pública Gestión Sanitaria de Canarias, controlada hasta hace bien poquito, casi nada, por el PP, con la vigilancia laxa de José Miguel Ruano. Pues bien, en 2010 el gerente de Gestión Sanitaria de Canarias, el comisario de Policía en excedencia Luis Molina, adjudicó por más de 3,4 millones de euros el diseño e implantación del Sistema de Gestión Integral de Seguridad Canarias (Sigesca). Tomen nota de este nombre porque a partir de ahora van a oír hablar de él con relativa frecuencia. Este mismo lunes, la Dirección General de Seguridad y Emergencias anunciaba que a partir de septiembre comenzarán las pruebas de este sistema, con el que se pretende conectar administrativamente a la Policía Canaria con las policías locales y otros cuerpos y fuerzas de seguridad, incluso con el Ministerio del Interior. Para que vayan haciendo boca les diremos que la adjudicación de este concurso fue para una UTE encabezada por la muy conocida Accenture, autora del calamitoso desastre de los sistemas informáticos de Justicia, los famosos Atlante I y Atlante II, que tienen más agujeros que un queso gruyere.