El diario en cuestión presenta un alarmante déficit de credibilidad e influencia, especialmente por la banda izquierda. Ser los voceros de Soria con tanto descaro, hacerse mauricianos luego y abrazar tantas operaciones indecentes como si fueran propias, le ha granjeado la sospecha, cuando no el alejamiento de los socialistas. Así que los viejos rockeros se pusieron a currar de lo lindo. Mandaron al reponedor a Madrid, a hablar con el ministro, al otro rockero a conseguir artículos de opinión de destacadas firmas socialistas... y todos a una, llamando a la gente del PSC para decirles que aquella es su casa, que si alguna vez hubo algún problema de comunicación, pelillos a la mar. Lo malo es que ahora cogen a los socialistas con posibilidades de ganar unas elecciones, y a algunos de ellos muy cabreados con el periódico soriano. ¿O ahora es mauriciano? O tanto monta, monta tanto.