Una vez explicado el pelo-tebetazo de Jaime Cortezo en el Islote del Francés, y aunque es nuestra intención tenerles al corriente de las vicisitudes que sufra este nuevo intento de llevarse por delante el interés general, detengámonos un segundo más en el convenio urbanístico que unió al empresario con el Ayuntamiento de Arrecife. Ahora que está tan de moda destituir a funcionarios por errores de los políticos, ¿alguien podría decirnos quién fue el responsable de que en ese convenio que se incorporaba al Avance del 2003 se dijera que el Islote era suelo urbano consolidado? Porque tiene que existir un responsable. Y diciendo como dice la Ley de Costas que los avances del planeamiento general tienen que tener deslindes del espacio público marítimo terrestre, ¿cómo es el Ayuntamiento de Arrecife afirma en ese avance que la propiedad de Cortezo tiene 56.000 metros cuadrados cuando sólo la servidumbre de protección se lleva por delante 40.000 y deja, en el mejor de los casos 10.000 fuera de esa consideración? Quizás no haya responsables porque el documento decayó, pero sigue vivo como documento público de la Administración municipal.