Siguen aflorando de modo imparable nuevos aspectos de ese innovador modelo ideado por Paulino y por Soria para explotar hasta la extenuación la teta de las producciones audiovisuales peninsulares en tierras canarias, y vivan las chácaras. La empresa de Martín Rivero, hermano de Carmelo Rivero (3.000 euros por caverna, manda Trillos) ha recibido la módica cantidad de 100.000 euros por un trabajillo fino consistente en promocionar el uso de la Reserva de Inversiones en servicios audiovisuales. Nadie ha podido precisar con rigor si finalmente se hizo el spot, si fue folleto o si todo quedó en unas charlas para rellenar, dada la constatación de que los elegidos para invertir ya lo sabían todo al respecto. Y más.