La Casa de Canarias en Madrid fue el escenario elegido por Exterior XXI, asociación progresista del servicio exterior español, para hacer pública su reclamación al Gobierno de Zapatero de una solución al “desamparo laboral” de miles de empleados públicos repartidos por las Embajadas de España. Es noticia que exista una asociación progresista que defienda los intereses de los empleados públicos en el exterior, y es noticia que elija la Casa de Canarias para dar a conocer sus reclamaciones. Pero más noticia es que lo haga con el aval de dos ministros y un ex ministro socialistas. Efectivamente, Miguel Ángel Moratinos, Juan Fernando López Aguilar y Jerónimo Saavedra (este último es el presidente de la asociación) acudieron al acto de presentación del calendario de actividades para 2007 y para contar la situación “anacrónica” y “predemocrática” que, según el vicepresidente de Exterior XXI, Damián Peña, sufren los más de 6.000 empleados que reciben por el mismo trabajo diferentes prestaciones laborales, “en muchos casos ninguna”. También gracias a ese acto de la noche de este miércoles hemos sabido que Saavedra está preocupado por “la urgente necesidad de modernizar y ampliar el servicio exterior español abriendo Embajadas en aquellos países de África donde no tenemos presencia”. La ausencia de representación diplomática en la ribera atlántica de África “impide que seamos eficaces a la hora de hacer frente al fenómeno de la inmigración irregular”, dijo Saavedra.