No es despreciable lo ocurrido este jueves en el pleno del Cabildo de Tenerife, por mucho que las decisiones tomadas carezcan de valor ejecutivo alguno. Por primera vez se entra en serio a hablar de corrupción en una institución tinerfeña y, por lo tanto, por primera vez queda patente dónde está cada cual ante la evidencia de que el fenómeno existe y que toca a los partidos que gobiernan. Actuaron a favor de los denunciados por la Fiscalía los portavoces de ATI y del PP, José Manuel Bermúdez y Ángel Llanos, respectivamente, y reclamando resoluciones para paralizar Las Teresitas, el portavoz socialista, Antonio Martinón. Melchior, al que un gato debe haberle comido la lengua en el lapso entre la querella y su admisión a trámite, se dedicó a moderar el debate como haría el presentador más neutral. De todos los intervinientes fue sin duda Ángel Llanos, portavoz del PP y candidato a la alcaldía de Santa Cruz de Tenerife, el que se llevó todos los premios.