Vamos a fundar un club de fans del primer teniente de alcalde de Santa Cruz de Tenerife, Ángel Llanos, convencidos de que conseguiremos aglutinar a un importante número de seguidores encantados de tener en la vida política canaria un personaje tan carismático. Es un auténtico camaleón, que lo mismo discursea en favor de la libertad de mercado y de los derechos individuales, que te saca una ordenanza fascista. O se te presenta en el concierto de Silvio Rodríguez vestido de rojo. Y si decimos vestido de rojo no estamos asegurando que ese fuera exactamente el color de su indumentaria, sino la intencionalidad de la misma. Ahí, confundido entre el mester de progresía, rodeado de presuntos trasnochados que gritaban aquello de “Cuba sí, yankis no”, se encontraba nuestro héroe con vaqueros desgastados y ceñida camisa de conciertos de los setenta. Le delataba la pulserita con la bandera de España, lo que nos sirvió para confirmar que se trataba de él.