El Comité Ejecutivo y la Junta Directiva de la Confederación Canaria de Empresarios previstos para este miércoles se presentan caldeaditos. La falta de quorum del comité en el que se abordó la separación de Félix Santiago y la vergüenza que a muchos destacados empresarios está produciendo el papelón de la patronal, pudieran confluir en que algunas voces se alcen para hablar de dignidad, de la necesaria independencia de los empresarios del poder político, del disparate que supone ponerse del lado del PP y del Gobierno en un organismo que legal y orgánicamente no depende de las instituciones canarias, sino de Puertos del Estado, con lo que eso significa de enfrentamientos innecesarios y nocivos para la salud. Tiene ante sí la patronal de la provincia de Las Palmas una oportunidad inigualable de demostrar de qué madera están hechos los empresarios, y en consecuencia, de qué barro están hechos los pies de algunos políticos.