Daniel Cerdán se marcha como llegó: por la puerta de atrás. Cuando Santiago González dimitió para asumir la dirección de Radio Nacional de España, el Gobierno de Adán Martín le nombró sin escuchar ningún informe del consejo de administración del Ente público, por eso su nombramiento está recurrido en los tribunales por los socialistas. Ahora Cerdán quiere protagonizar su última reunión en el consejo del Ente sin respetar la propia ley de Radiotelevisión Canaria, según la cual, cuando un tercio de los consejeros solicita una reunión extraordinaria del consejo de administración, el orden del día debe ser propuesto por los consejeros que convocan ha añadido su cese y el nombramiento de su sustituto, y si le apoyan en esa pretensión los consejeros del PP y de Coalición Canaria, podría votarse en primer lugar ese punto, aceptarse la dimisión del director general y evitarle que tenga que informar sobre el atolondrado concurso. Si se repite lo que sucedió con el nombramiento de Cerdán, unas horas antes de la reunión el consejero de Industria podría llamar a Marcos para comunicarle un nombre. Suenan Esteban Morales, Miguel Ángel Daswani y Jaime Pérez-Llombet.