En el Puerto de Las Palmas ya preparan los papeles para el desembarco con categoría de jefa de departamento de una mujer del larryquismo, movimiento consistente en que nadie se mueve si no es para ir bien enchufado/a. La afortunada nueva jefa de prensa, de nombre Teresa Cruz, esposa del mismísimo Larry Álvarez, vicepresidente tercero del Cabildo, tendrá un grado más de categoría laboral que su antecesor, lo que supondrá un salario mínimo mensual de unos 2.500 euros limpios de polvo y paja. A Manolo Vidal lo piensan despedir, más que nada para que por los alrededores no haya mucha gente los próximos ocho años que tenga ojos, oídos, nariz y boca. Mientras tanto, a los trabajadores de fuera de convenio ya les han pagado la nómina sin el concepto variable. Vamos, que les han quitado los euros sin advertirles ni de la forma más elemental. Pero vamos a ver, ¿realmente alguien ha votado a alguien para que actúe con este sentimiento negativo, hijo del sectarismo? Y esos sectarios, cuando el gobierno y los tiempos sean otros, ¿piensan seguir viviendo en la tierra guanche o piensan mandarse a mudar?