Se han quedado patidifusos este viernes los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Mogán al conocer que el PP de Paquirrín va a llevar al pleno de este mes un nuevo Avance del Plan General de Ordenación Urbana. Los concejales han sido convocados para el próximo martes a la comisión informativa (08:45) y tendrán solo 75 horas y cuarto para estudiarse el tocho urbanístico antes del pleno del próximo viernes (12:00). Este viernes nadie entendía nada en Mogán. El PGOU investigado en el caso Góndola acabó en mayo pasado en el cubo de la basura, al desistir el Ayuntamiento de su tramitación tras un durísimo informe de la Dirección General de Urbanismo del Gobierno de Canarias. El alcalde, en sus trece habituales, restó hierro candente al caso hasta el punto de decir que sólo era cuestión de subsanar defectos de forma y empezar de nuevo el procedimiento. Pero lo cierto es que el informe del Gobierno ponía a caer de un burro el lolailo con que se entiende el urbanismo en Mogán. Desde la redacción de convenios urbanísticos sin justificación debida que los convierte en documentos arbitrarios, hasta el atentado medioambiental en parajes protegidos, qué casualidad, en terrenos convertidos en urbanizables que son propiedad del empresario Santiago Santana Cazorla.