Lo que pudimos ver este lunes en el pleno de Ingenio es el resultado de muchas pasiones cruzadas. Una de ellas la capitanea Agrupa Sureste, un partido nacido, al igual que Avin, del comité Peligra el Burrero, un colectivo que, bajo el manto del ecologismo, lo que pretendía era salvar las casas que se levantaban en primera orilla de playa, exactamente en zona de dominio público. A los afectados se les ofreció un apartamento en lo que hoy es primera línea, o en su defecto, al expropiación. Y pleitearon hasta el Supremo, donde se encuentra ahora la discusión acerca del justiprecio pagado. Uno de los afectados por esas expropiaciones es el dermatólogo Pedro Valerón, líder y motor de Agrupa, que recientemente ha montado hasta una televisión, Tele Carrizal, desde la que se emiten las noticias más elocuentes del grupo de Gobierno (PSC). Esta tele es la que se ha quejado de falta de transparencia de la Corporación al impedírsele acreditarse como medio de comunicación convencional. Desde esas expropiaciones, ordenadas por Costas, la guerra ha sido total contra cualquier decisión municipal que tenga que ver con El Burrero, donde hay muchos vecinos, por cierto, que sí están de acuerdo con lo hecho. Tanto, que el PSC, si pudiera, haría un referéndum. El PP, por contra, se atorra y amenaza con llamar a Costas, y CC, curiosamente, se apunta a la tesis del referéndum. Al final, para no engañarnos, tumbar el dique se ha convertido en un símbolo que significaría tumbar al PSC, que manda desde hace un porrón de años en el municipio.