Lo peor del asunto de la carretera congelada en Mogán es que en el fondo parece estar la regularización de un proyecto que la Consejería de Castro Cordobez podría estar ejecutando de forma distinta a lo aprobado. ¿Estará por ello el señor Castellano pensando seriamente la posibilidad de parar las obras que acaso sea lo que tiene que hacer? ¿Sería esa firma -la de la paralización- cumpliendo su obligación o en barbecho? La carretera habrá que hacerla, entendemos, porque al ciudadano no se le puede seguir machacando diariamente con inaguantables atascos, ni con las cosas de la Consejería de Política Territorial, que transmite la imagen de que se desarreglan desde allí los asuntos que debería solucionar. Mientras, en Mogán, los candidatos de siempre y de ahora, eligen pieza que papearse porque temática ya tienen. Y en Gáldar, al otro lado de la isla, el Plan General que Demetrio ha mandado a Castellano califica mucho suelo de barbecho, modelo agresivo que le llaman, no sabemos si por revancha tipo mandíbula ardiente después de la calabaza del PSOE, o si para hacerle al director general un arreglo que le transmita la duda existencial de lo sencillo que es alcanzar ese cargo y lo remolón que se pone el Cabildo para otros. En fin. Nos preguntamos si la revancha será en Gáldar, en Arucas o en terreno neutral. Mientras, El Corte Inglés en Meloneras se lo va a tragar el señor Castellano salvo sorpresa inesperada y sin que nos podamos enterar de si será en suelo comercial de barbecho o de puro regadío.