Se cubrió de gloria el presidente del Gobierno, Paulino Rivero, cuando dijo en El Correíllo que la propuesta de subir los sueldos a los diputados regionales partió del portavoz del PSOE, Francisco Hernández Spínola, cuando en realidad fue de la portavoz del PP, Australia Navarro, que se parece al primero exactamente como un huevo a una castaña. Debemos dejar un patinazo así en el ámbito estricto de los lapsus, porque no nos creemos que un presidente tan serio como Rivero se dedique a mentir en plan vicepresidente, que ya con uno vamos sobrados. Algo parecido debió ocurrirle al responsable de la revista municipal de Puerto del Rosario que, en su número 7, correspondiente al mes de agosto, atribuye al grupo de gobierno la propuesta de un acuerdo plenario de mejoras educativas en la capital majorera que en realidad fue iniciativa de la oposición, que se sube ahora por las paredes.