Ya dio señales de vida Televisión Canaria ante el desaguisado de Nochevieja, cuando retrasó la comida de uvas y la rima del cinco casi dos minutos a sus telespectadores. En una nota hecha pública este lunes, asegura que “el retraso de 1:57 minutos” fue “totalmente ajeno” a la cadena. Que ellos se limitaron a “a retransmitir en directo desde la plaza de San Juan de Arucas, y siguiendo el reloj de la Iglesia, las campanadas de fin de año, habiendo sido ajustado previamente dicho reloj por el técnico de mantenimiento del Ayuntamiento”. La cadena asegura que estaba tan confiada cuando “después de las 20:30 horas del día 31, cuando TV Canaria ya no podía hacer nada para solucionarlo” les comunica el manitas aruquense que aquello estaba averiado y que creía conveniente no tocar el reloj. Pues ala, la culpa, a Rompetechos, que estará encantado. Se agradecen las explicaciones, pero peor fue lo de Marisa Naranjo, y no hubo año catastrófico.